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Universidad de Chile

Madres y Padres Universitarios

Compatibilizando crianza con estudios: la lucha de MAPAU

Compatibilizando crianza con estudios: la lucha de MAPAU

Durante los últimos años la agrupación -que reúne a los estudiantes que son madres y padres en la Universidad de Chile- ha trabajado junto a diferentes instancias de nuestra institución para superar los inconvenientes que sufren durante su proceso de estudios superiores debido a su decisión de tener familia. Fruto de ese trabajo conjunto, han podido impulsar la construcción de jardines infantiles y salas cuna, una propuesta de modificación del reglamento estudiantil, y un proyecto de ley contra la discriminación que se encuentra en el Congreso.

El 2013 un grupo de jóvenes crearon la agrupación de Madres y Padres Universitarios (MAPAU) de la Universidad de Chile, recogiendo la experiencia de un grupo similar generado en la Universidad Católica algunos años antes. Su objetivo fue visibilizar las dificultades que vivían de manera cotidiana los estudiantes que deciden ser madres o padres durante su etapa de formación académica, y el nulo apoyo que recibían por parte de la institución.

“Uno está habituado al rol del joven dedicado a las clases y a estudiar, sin embargo también somos hijos, somos madres y padres, somos nietos, y lo que tratamos de hacer es que la institución acuse recibo de esto y nos comprenda en todo nuestro contexto, de manera integral como estudiantes", explicó Estefanía Álvarez, estudiante de Ingeniería Industrial y Coordinadora de MAPAU en el Campus Beauchef.

Los problemas que sufren las jóvenes embarazadas en la Universidad de Chile lamentablemente no son una situación aislada, motivo por el cual la Oficina de Igualdad de Oportunidades de Género de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad (VEXCOM), MAPAU y los delegados de bienestar de la FECh, realizaron un catastro para tener una visión global respecto a la situación y diseñar medidas que permitan entregar el apoyo necesario.

Tras años de trabajo conjunto, se han logrado avances concretos en dos materias al interior de la institución. Por una parte ya se encuentra en etapa de ejecución la construcción de cuatro jardines infantiles y salas cuna en los campus universitarios, que permitirán entregar plazas para los hijos de trabajadoras y estudiantes. Además, se elaboró una propuesta de Política de Corresponsabilidad para conciliar los roles familiares y el desempeño laboral o estudiantil. 

Según explicó Carmen Andrade, directora de la Oficina de la Oficina de Igualdad de Oportunidades de Género, esta modificiación reglamentaria busca responder a las necesidades de alumnas y alumnos que son madres y padres, planteando una serie de medidas que flexibilizan los requisitos para su desempeño como estudiantes que están embarazadas y en etapa de crianza.

"La idea es que se les permita tomar ramos primero para tener mejores horarios, menores exigencias de asistencia, que se les pueda permitir hacer trabajos desde la casa o se acepte las licencias médicas de sus hijos, tal como se hace con las trabajadoras", detalló Andrade, quien además destacó que lo que se quiere lograr es que estos jóvenes "puedan seguir desarrollándose como estudiantes y no se vean obligados a renunciar a sus carreras mientras cumplen esa importante labor de criar". 

El reglamento ha sido presentado a diversas autoridades para recoger sugerencias, para luego ser revisado por la mesa del Senado Universitario y del Consejo Universitario.

Instalando la temática en otros planteles

Pero los cambios impulsados desde las estudiantes que son madres no se han quedado solamente al interior de nuestra Universidad. Este año, en conjunto con otras agrupaciones similares, los integrantes de MAPAU participaron del Segundo Congreso Nacional de Madres y Padres Universitarios, realizado el 3 y 4 de septiembre en la Casa Central de la Universidad de Chile.

En la oportunidad se reunieron jóvenes de Atacama a Valdivia de universidades, Centros de Formación Técnica e Institutos Profesionales, quienes compartieron sus experiencias, sus demandas, y los avances que se han logrado, para buscar mecanismos que permitan terminar con los abusos y la discriminación en todas las instituciones de Educación Superior.

"Pudimos sondear la situación a nivel nacional y había muchas historias terribles. En un Instituto Profesional está prohibido que las estudiantes entren con sus hijos, y tienen que esconderlos y rogarle a los profesores que no digan nada para poder asistir a clases cuando deben estar con ellos. Estas instituciones olvidan que a veces los niños están resfriados, o los jardines JUNJI están en paro, y se dan situaciones fortuitas donde las madres tienen que estar junto a sus hijos, no tienen otra opción", relató Estefanía Álvarez. 

Uno de los acuerdos, ratificados por los asistentes, fue la presentación de un proyecto de ley en el Congreso que asegure la no discriminación a las madres y padres que sean estudiantes universitarios, el que fue patrocinado entre otros, por las diputadas Karol Cariola y Camila Vallejo. 

La diputada Vallejo explicó que la iniciativa "plantea una serie de derechos que las instituciones de Educación Superior deben resguardar a través de planes específicos para poder garantizar la continuidad de estudios de estos jóvenes, tanto en el ámbito de la alimentación para sus hijos como la posibilidad de fuero para algunas materias respecto a horas mínimas de asistencia".

La parlamentaria aseguró que espera que su tramitación avance con celeridad "para que nuestros jóvenes puedan desarrollar sus estudios y puedan además tener una educación digna, compatible con la maternidad y paternidad que ellos libremente han decidido asumir".