En Santiago, Coyhaique y Los Lagos

Investigadores del ICEI realizan talleres para introducir el cine en la escuela

La actividad práctica y exploratoria es parte del Proyecto Bicentenario "Cero en Conducta", gestado en el marco del Seminario Internacional "El Cine es Escuela" realizado en 2014 en el ICEI. El equipo multidisciplinario e interuniversitario ejecutor está encabezado por el profesor Ignacio Agüero y participan profesores, funcionarios y egresados de la carrera de Cine y Televisión y del Magíster en Cine Documental.

Con el objetivo de experimentar y diseñar una propuesta que inserte el cine en el aula y se vincule en esta vivencia a estudiantes y profesores, el proyecto “Cero en Conducta” realiza diversos talleres de cine en colegios de Santiago, Coyhaique y Los Lagos como parte de su etapa exploratoria.

Esta iniciativa es una de las ganadoras de la 5ta convocatoria del Fondo de Investigación y Creación de la Iniciativa Bicentenario de 2015 de la Universidad de Chile. Proyecto que se gestó como una continuación del Seminario Internacional “El Cine es Escuela” realizado por el Instituto de la Comunicación e Imagen (ICEI) en 2014, instancia que convocaba a pensar acerca de las formas de introducir el cine en la escuela y que expuso las experiencias nacionales e internacionales que dan cuenta de lo positivo y las oportunidades de vincular ambos mundos.

En esta oportunidad, el equipo de talleristas está conformado por el profesor Ignacio Agüero, Coordinador del Magíster en Cine Documental del ICEI; Daniel Cruz, académico del Departamento de Artes Visuales de la Facultad de Artes; Daniela Sabrovsky, profesora de la Carrera de Cine y Televisión del ICEI; Constanza Contreras y Nicolás Guzmán, funcionarios y egresados del ICEIy Bernardita Olmedo y Paola Campos, tesistas del Magíster en Cine Documental.

Durante julio se inició la etapa de taller con la Escuela Pedro Quintana Mansilla de Coyhaique, a cargo del profesor Ignacio Agüero, junto al profesor de teatro del colegio, Mario Müller. “Fue una experiencia que removió a los alumnos. Vieron trozos de once películas largas y cortos enteros. Las obras no eran especialmente hechas para niños o jóvenes, sino que solamente buenas películas. El único dato que les entregamos fue el nombre del director, el año y lugar en que fue filmada la película. Previamente los propios alumnos experimentaron el oscurecimiento total de la sala y después se hizo la proyección con una buena calidad técnica de imagen y sonido. Por todas estas cosas los jóvenes quedaron inquietos”, explicó Agüero.

Sobre el desarrollo y resultado de las actividades realizadas en este taller, el profesor añadió que si bien son preliminares, “hay experiencias que aún siendo muy bien inspiradas, en el camino de su ejecución van distorsionando el propósito de la inclusión del cine en la escuela. Lo intensamente ocupados que están los profesores en planificar, enseñar y evaluar, y los alumnos en cumplir con todo lo que se les exige, significaría para el cine entrar a codazos en el espacio educativo. A pesar de ello, también hemos visto por parte de algunos directores y profesores una gran disposición a abrirse a esta nueva experiencia, porque intuyen que algo pedagógicamente muy rico puede ocurrir ahí”.

Bernardita Olmedo y Paola Campos, tesistas del Magíster en cine documental son las encargadas de ejecutar el taller con 11 estudiantes de sexto básico de la Escuela República de Argentina de la comuna de Padre Hurtado en Santiago, que comenzó en el mes y junio y que culminará luego de las vacaciones de invierno.

“Participar de este proyecto no sólo nos ha acercado a diversas experiencias ligadas al cine y la escuela, sino también a la forma en que el sistema educativo actual se empeña en ‘enseñar’ los contenidos, restando importancia a la reflexión y a la experimentación. Esto genera que los alumnos y los apoderados depositen en los profesores toda la responsabilidad de su formación y desconozcan las innumerables posibilidades que se abren al cuestionar aquello que les rodea y participar de su comprensión”, comentó Bernardita Olmedo.

En tanto, Paola Campos agregó que “esta experiencia ha permitido derribar prejuicios que parecían asumidos por los mismos estudiantes, por los adultos que les rodean, y sinceramente también desarmar cierta aprensión en nosotras, demostrando finalmente que los chicos son capaces de apreciar, crear y disfrutar todo tipo de cine. Esto demuestra que sólo necesitan ser estimulados y tratados como personas autónomas, capaces de tomar decisiones y responsabilizarse por ellas. El resto corre por su cuenta”.

Investigación en Cine y Educación

La línea investigativa que contempla el proyecto “Cero en conducta”, convoca a un grupo amplio de profesionales, académicos, investigadores, teóricos, pedagogos, cineastas y artistas, que han tenido alguna experiencia de introducción del cine en escuelas o manifiestan interés en el tema. Estos profesionales esperan avanzar en la formulación de modos concretos que permitan implementar la transmisión del cine en el aula, vinculando la teoría y la práctica y aventurando modos inéditos de iniciar a los estudiantes en la experiencia cinematográfica.

El núcleo interdisciplinario e interuniversitario que se complementa con el trabajo realizado en los talleres está integrado por: Ignacio Agüero, responsable del proyecto; Carlos Flores, profesor de la carrera de Cine y Televisión del ICEI; Ernesto Águila, director del Departamento de Estudios Pedagógicos (DEP) de la facultad de Filosofía y Humanidades; Luisa Miranda, profesora de esta unidad de la Universidad de Chile, y Enrique Matthey y Daniel Cruz de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile.

Además participa Wily Thayer, profesor de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación; Edgar Doll, director de la Escuela de Cine de la Universidad de Valparaíso, y Roxana Pey, Rectora de la Universidad de Aysén, entre otros.

El proyecto que cierra el 30 de agosto y que incluye la realización del taller en la región de Los Lagos, se divulgará a través del sitio www.ceroenconducta.cl y de un posterior libro que sistematizará la experiencia y los resultados de la investigación.