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Universidad de Chile

Prof. Theile realiza asesoría patrimonial al Monasterio benedictino de Rio de Janeiro

Prof. Theile asesora al Monasterio benedictino de Rio de Janeiro

En el marco de una asesoría profesional en el área de conservación del patrimonio del Monasterio benedictino de Rio de Janeiro, la profesora Johanna Theile del Departamento de Teoría de las Artes, trabaja en el análisis de diferentes muestras de fibras para identificar y datar alfombras y tapices, con el fin de revelar parte de su historia a través de esta información.

Cuidar el patrimonio, asesorar y educar son las metas que la profesora Johanna Theile se ha propuesto, tras la invitación que recibiera para trabajar con el famoso Monasterio benedictino de Rio de Janeiro.

Dicho monasterio fue fundado en 1590 y construido por la orden benedictina. Posee una sencilla y austera fachada que hace imposible imaginar las numerosas obras de interés artístico del siglo XVIII que se emplazan en su interior. Sorprende su decoración barroca -de hecho se considera la máxima expresión del Barroco brasileño- y el revestimiento de maderas doradas. Otro de los datos que sorprende es que fue decorado durante más de 70 años por diferentes artistas brasileños. 

"Tengo una relación muy estrecha con Brasil que tiene un gran patrimonio y una gran preocupación por la conservación y restauración. Visite Sao Paulo, trabaje con ellos después de un incendio en un museo y vi trabajos realizados en los museos, es maravilloso. Conocí al padre Mauro del Monasterio de los Benedictinos de Rio de Janeiro y me pidió visitar el monasterio durante mi estancia en Rio de Janeiro, debido al Congreso de conservación y patrimonio que tenía como sede esa ciudad. Ellos tenían un gran problema: la cuidad había decidido de hacer un túnel debajo del monasterio que es patrimonio mundial y con los explosivos que utilizaban para ello el inmueble temblaba y ponía en riesgo su colección y el edificio”, expresó la prof. Johanna Theile.

Un lugar con mucha historia

Así, comprobó por ella misma la magnitud de los temblores y realizó informes. Buscó también métodos para minimizar los daños, los que fueron considerados en los trabajos. Seguido de eso, los monjes le solicitaron ayuda para la conservación de sus libros, patrimonio mundial por su colección de música georgiana, sus cuadros y alfombras. Con el fin de capacitar a sus funcionarios, se le pide “al historiador de arte colonial religioso Mauro Maia Fragoso viajar a Chile a inicios del 2014 para obtener una formación mayor y aplicarla después en su monasterio”, cuenta la académica.

“Más de cuatro siglos de existencia del Monasterio benedictino de Rio de Janeiro se ha convertido en uno de los centros culturales más importantes de América. Actualmente se está en proceso de reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO por su contribución en la protección de la cultura nacional”, señaló Mauro Maia Fragoso.

Y agrega que “la colección del Monasterio se compone de obras de diferentes técnicas como la escultura, la pintura, el grabado y la tapicería, que abarca muchos géneros, como la pintura y la escultura, la pintura religiosa, histórica y la naturaleza muerta. El fondo bibliográfico de la biblioteca de libros raros está compuesta por aproximadamente diez mil volúmenes producidos desde el siglo XV”.

Re- descubriendo el patrimonio

Desde marzo de 2014 la académica ha analizado diferentes muestras para identificar y datar una especial alfombra encontrada recientemente y que podría tratarse de una gran objeto patrimonial de larga data. “No tiene claro el material, por lo que analicé una muestra bajo microscopio y pedí una segunda opinión a Isabel Alvarado, del Departamento textil del Museo Histórico Nacional, gran especialista en el tema. Cuando tengamos los resultados finales le enviaremos la información al Monasterio”, indicó la prof. Theile.

Por lo pronto ya se ha confeccionado una vitrina especial para tal objeto y la se espera sigan encontrando y analizando piezas patrimoniales, parte de la decoración y acervo del Monasterio.